En la actualidad es posible que cualquiera pueda tener su propio canal de televisión, con todos los programas que desee, en Internet. La dificultad depende de las ganas de innovar que tenga el usuario.
Se puede crear simplemente como versión «live» de un blog, o sofisticarlo mucho más hasta configurar una programación completa, con estudio, reportajes, noticias y otros programas relacionados con la actividad de la empresa o particular.
La tecnología apropiada permite crear, subir y montar los vídeos de los programas.
En el caso de las empresas que así lo deseen, se puede crear una página web corporativa en la que se incluye el servicio de emisión de vídeos, a través de la cual pueden editar los contenidos.
Un ejemplo práctico de canal corporativo de TV en Internet es el de una de las principales radiofórmulas francesas NRJ – www.nrj.fr/ – que creó un pequeño canal en el que los oyentes podían subir sus propios vídeos, a cambio de un premio. La iniciativa fue un éxito y tanto las visitas a la web como los registros a la comunidad crecieron considerablemente.
Gracias a este sistema las webs corporativas pueden conseguir crear sólidas comunidades con sus usuarios e incluso crear la primera televisión realizada por los propios internautas, www.latelelibre.fr.